Quiobo raza, está vez nos tocó hacer unos volcanes de aguja norteña, con su piquito de gallo y todo el pedo.
Esta es una receta bien fácil, pero requiere de paciencia y rapidez. Realmente estos volcanes se pueden hacer de lo que quieras, volcanes de arrachera, de filete, de diezmillo, de lo que haya en el refri.

Yo recomiendo usar tortillas gruesas, las vamos a tener sobre la parrilla a la vuelta y vuelta, 10 segundos por lado hasta que se tuesten y las hacemos a un lado frío del asador o en la parrilla flotante.
Y pues ponemos la carne previamente sazonada con sal y pimienta o tu rub favorito. Ya que la carne esté lista vamos a cortarla en pedazos comibles.
Para terminar de armar estos volcanes de aguja norteña vamos a poner de nuevo las tostadas a calentar un poco y le ponemos un chingazo de queso chihuahua o gouda para que empiece a derretir y le ponemos la carne encima, los dejamos un ratito a que gratine el queso y los sacamos.
Para servir yo digo que el pico de gallo es el mejor amigo de los volcanes, y pues nada, te haces una salsa verde de jalapeños y aceite, le pones su limón y vámonos.